Los mariscos están presentes en nuestro menú diario, porque ¿a quién no le apetece una gambas al ajillo o un pulpo a la gallega? Son simplemente deliciosos y nutritivos.
La cocina española tiene diversas recetas de mariscos y sus métodos de cocción son sencillos y fáciles de aplicar. Veamos los principales: a la plancha y al vapor o en agua.
Los mariscos a la plancha: esté método de cocción se aplica a los crustáceos, como las gambas, cigalas, langostas y langostinos, que llamaremos mariscos de cola. Se recomienda asarlos primero por la parte de su cáscara y luego darlos vuelta al lado de la carne. Si ya vienen pelados, son ideales para brochetas y pinchos y solamente llevan unos 5 a 8 minutos de cocción.
Los mariscos cocidos en agua o vapor: la regla culinaria dice que los mariscos vivos se deben cocer en agua fría y los muertos directamente en agua hirviendo, pero también es recomendable colocar los mariscos vivos al vapor. Una vez que están cocidos en agua o vapor, hay que sumergirlos en agua con hielo para frenar la cocción y que su carne quede gustosa.
Si es un marisco vivo se sumerge en el agua cuando comience a hervir por:
- Nécoras: de 8 a 10 minutos
- Cigalas y langostinos: de 3 a 5 minutos
- Gamba: cuando se recupera el hervor
- Centollo: 20 minutos
- Buey de mar: 20 minutos
- Percebes: cuando se recupera el hervor
- Langosta: 25 minutos
- Bogavante: 25 minutos
Si es un marisco muerto se cuece en un líquido que ya está hirviendo (puede agua con sal o caldo) por:
- Si son piezas enteras de hasta 1 kilo: 20 minutos
- Si son piezas pequeñas de hasta 1 kilo: 5 minutos para las frescas, 8 minutos para las congeladas.
Fuente: Consumer