El mejillón, molusco bivalvo de gran importancia en la gastronomía española, es conocido por su colonización de zonas rocosas y su presencia en la zona de mareas.
Origen y características: los mejillones (Mytilus edulis) son moluscos filtradores que habitan en aguas marinas, fijados al sustrato, donde se nutren de plancton y pequeñas criaturas microscópicas que flotan en el agua. Son exclusivamente marinos y se encuentran en zonas intermareales y sumergidas a lo largo de las costas de todo el mundo. Sin embargo, es en las cristalinas aguas de Galicia donde estos moluscos alcanzan su máxima calidad y prestigio.
En Galicia, los mejillones se cultivan en bateas en rías como Vigo, Pontevedra, Muros, Ares y Arousa, desde hace más de cuatro décadas. La innovación en técnicas de aprovechamiento de los recursos marinos llevó al surgimiento de fábricas de salazón, precursoras de las actuales industrias conserveras, que son una fuente de riqueza vital para estas comarcas. Los mejillones de Galicia son altamente valorados y disfrutados por su sabor excepcional y su versatilidad culinaria.
Temporada y versatilidad en la cocina: la época de mayor disfrute de los mejillones es la primavera, aunque su exquisito sabor puede deleitar los paladares durante todo el año. Estos moluscos versátiles son un elemento culinario esencial en Galicia y más allá.
Nutrición y salud: los mejillones son una fuente rica de grasas saludables, especialmente ácidos grasos omega-3, que desempeñan un papel crucial en la prevención de enfermedades cardiovasculares y el cáncer. Además, son un alimento rico en proteínas de alta calidad y una amplia variedad de minerales esenciales.
Preparación y consumo: en Galicia, los mejillones se consumen comúnmente al vapor, con un toque de limón para resaltar su sabor natural y fresco. En otras regiones, es común disfrutarlos en salsa vinagreta o en escabeche, preparados como «tigres». Para esta última preparación, se utiliza la concha del mejillón, que actúa como carcasa para una deliciosa bechamel elaborada con la carne del propio mejillón, gambas y trozos de pescado. Esta mezcla se reboza en huevo y pan rallado antes de ser frita, creando un bocado irresistiblemente sabroso.
Los mejillones gallegos son un auténtico manjar del mar Cantábrico, que deleitan los sentidos con su sabor y nutrición excepcionales. Ya sea al vapor, en vinagreta, en escabeche o como «tigres», estos moluscos son una joya culinaria que enriquece cualquier mesa con su sabor inigualable y sus beneficios para la salud.